lunes, 8 de julio de 2013

¡¡¡¡ ESAS FALTAS¡¡¡¡


               Hay cosas tan obvias, tan repetidas, que se convierten en tópicos. Pero también corremos el riego de que se nos olviden.  Hablo de las faltas de ortografía y de gramática (entendida ésta como  "Arte de hablar y escribir correctamente una lengua").

                Es cierto que las nuevas vías de comunicación (whtasapp, sms,mms,...)    han tenido una influencia decisiva sobre la forma en la que redactamos y expresamos nuestras ideas:  usamos extranjerismos, abreviaturas, símbolos, emoticonos,  "castellanizamos"  términos, otros los hacemos más coloquiales, ....

                Intentamos que nuestra vida sea más fácil;  pero también podemos incurrir en  errores garrafales que dejen en evidencia nuestras carencias, arruinando  -o cuando menos afeando-  nuestra  "imagen". Me explico.

                El Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua establece varias  acepciones de la palabra CULTURA. A efectos de  este artículo me quedo con la siguiente:  "Conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, científico, industrial, en una época, grupo social, etc...."   Igualmente dice que  EDUCACIÓN significa, entre otras cosas,  "cortesía, urbanidad".

                Cuando me enfrento a una selección,  en el primer vistazo no suelo detectar estas faltas ortográficas y/o gramaticales. Pero cuando entro a fondo en las candidaturas que considero interesantes,  ¡¡¡no podéis imaginar lo que se encuentra¡¡¡.  Algún día, los seleccionadores podríamos publicar un libro, al estilo del de las respuestas de los alumnos en los exámenes.  Pero OJO: estos mismos errores se producen (y cada vez más) en la redacción de las ofertas de empleo.  

                Evidentemente, hay que tener en cuenta el puesto para el que seleccionas  (no puede pedirse lo mismo a un Auxiliar de taller que a un Profesor universitario); pero también debemos recordar  que existen herramientas   -al alcance de todos-   que pueden evitar errores  "básicos" (correctores de textos, diccionarios on line,..).

 

                No se trata de redactar como Cervantes o como Gala: se trata de expresar las ideas sin faltas ortográficas,  de forma coherente, ordenada e inteligible. Una Oferta de trabajo o una Candidatura deben considerarse DOCUMENTOS FORMALES y, como tal, deben ajustarse a las reglas mínimas de Cultura y Educación.
              
               Otra cosa muy curiosa: donde menos errores o faltas se producen es en el curriculum.  Quizás porque se suelen usar formatos más estándares o rígidos.    ¡¡¡Pero las cartas de presentación y las pruebas escritas son una mina¡¡¡.   Y si hablamos de las redes sociales,.....
 

                Es cierto que el impacto y la importancia de una mala redacción o de las faltas de ortografía,  dependen del contexto y del receptor. Sin embargo, no lo es menos que, por regla general, dicen mucho de su autor: desinterés, prisa, salir del paso, falta de cultura (ausencia de conocimientos y desarrollo) y/o educación (defectos de cortesía y urbanidad), ....... 

 
¿Es necesario arriesgarse?